Takashi Paolo y Midori Marina Nagai.

Nagai. El don de dos esposos

Los conocimos con la exposición del Meeting de Rímini y el libro “Requiem por Nagasaki”. A los 70 años de su muerte, nace un comité para promover el conocimiento de la vida excepcional del médico japonés Takashi Nagai y su esposa Midori
Gabriele di Comite, Paola Marenco, Massimo Morelli*

Primero de mayo de 2021. Hace setenta años llevaba a término el don de su vida Takashi Paolo Nagai (1908-1951), médico radiólogo japonés que sobrevivió a la bomba atómica de Nagasaki, cuya increíble y conmovedora historia humana y de fe, junto a la de su mujer Midori Marina (1908-1945), pudimos conocer gracias al libro de Paul Glynn Requiem por Nagasaki (Arcaduz Palabra, 2017).
Algunos de nosotros quedamos profundamente marcados por su testimonio y quisimos conocer mejor su historia y compartirla con nuestros amigos. Así nació la exposición Takashi Paolo Nagai. Anuncio desde Nagasaki, realizada para el Meeting de Rímini 2019. Allí recorrimos, junto a más de quince mil visitantes, la historia de Takashi, un hombre de ciencia, convencido ateo positivista, pero con una razón tan abierta que se dejó desplazar por las provocaciones de la vida y de la muerte, hasta dejarse guiar al bautismo por su encuentro con Midori, un ejemplo sorprendente de fe y de virginidad que luego se convertiría en su esposa.

Takashi Paolo Nagai

El 9 de agosto de 1945 la vida de Midori se cumple en su último sacrificio, llevada al cielo por el hongo nuclear mientras aferra su rosario. Takashi empieza a recorrer el camino de una profunda y buscada pobreza de espíritu, que le lleva a experimentar la amistad del Señor en el desierto de la bomba atómica, y a vivir ese céntuplo de la fe que le convierte en un anuncio vivo de esperanza y paz para su pueblo. Por eso, va a verle muchísima gente. Le llamaban “el santo de Urakami” porque, estando enfermo de leucemia, era para sus vecinos durante aquellos años una fuente de vida y por tanto les ofrecía la posibilidad de reconstruir a partir de las ruinas, como quiso mostrar a todos con los mil cerezos que hizo plantar con sus primeros ingresos.

Después de la exposición, los comisarios nos dimos cuenta con asombro de que seguía creciendo el número de personas marcadas por el testimonio de estos esposos. Nos escribían para saber más y para contarnos cómo habían llegado a convertirse en una compañía cotidiana para sus fatigas diarias. La exposición se llevó a varias ciudades italianas en su versión itinerante y, tras el estallido de la pandemia, se multiplicaron las peticiones, desde muchos lugares del mundo, para presentarla vía web. Hemos llegado a países de los cinco continentes y mucha gente, al ver la excepcionalidad de las virtudes cristianas de Takashi y Midori, nos preguntaban si había algún proceso eclesial para su reconocimiento, para proponérselos a todos como compañeros de camino. De este modo, siendo nosotros los primeros sorprendidos (nunca habríamos pensado emprender algo así en nuestra vida) y confirmados por una serie de encuentros y signos inesperados, hemos asumido la responsabilidad de señalar su fama de santidad a la Iglesia para que pueda considerar la posibilidad de emprender el itinerario de una posible causa de beatificación y canonización. En marzo de este año se constituyó el comité de “Amigos de Takashi y Midori Nagai”, cuyo objetivo es promover por todo el mundo el conocimiento de la vida excepcional de esta pareja de esposos, y presentarse como actor canónico en la diócesis de Nagasaki y en la Congregación para las Causas de los Santos, para promover la apertura de una posible causa de beatificación.

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Es una gracia, en estos tiempos tan complicados, tener compañeros de camino a los que mirar. «Buscad cada día el rostro de los santos y encontraréis descanso en sus palabras» (Didachè IV,2).

Más información en www.amicinagai.com
*Junta directiva del comité “Amigos de Takashi e Midori Nagai”