En las vacaciones de Navidad, algunos bachilleres de Varese queríamos pasar un tiempo juntos y se nos ocurrió crear algo bonito para afrontar de la mejor manera este tiempo de confinamiento. Así surgió la idea de realizar, cumpliendo con todas las prescripciones establecidas, una serie de momentos juntos a modo de vacaciones de invierno como en años anteriores.

«¿Cómo vivir intensamente lo real?», era la pregunta de una de nosotros. En otras palabras, ¿cómo vencer el aburrimiento de este tiempo y cómo llegar a dar un sentido a nuestras jornadas? A partir de aquí empezaron nuestras vacaciones online.

Algunos, jóvenes y adultos, empezamos a vernos, divididos por grupos para organizar los gestos que se iban a proponer. Un grupo propuso la lecturas del libro Van Thuan, libre entre rejas, compartiendo cada mañana un archivo de audio donde algunos leían un fragmento y contaban lo que les había llamado la atención. El cardenal vietnamita Van Thuan se convirtió así en un testigo diario de lo que significa “vivir intensamente lo real” en cualquier circunstancia.

El 28 de diciembre tuvimos una velada de juegos online en la que participaron más de cincuenta personas, divididas en tres equipos. Había que buscar objetos repartidos por la casa (cada uno en la suya) en el menor tiempo posible o encontrar las diferencias entre dos fotos, juegos sencillos que nos hicieron pasar un buen rato y percibirnos unidos a pesar de lo insólito de la modalidad.

Luego tuvimos el testimonio de Paolo y Tiziana, médico y enfermera que trabajan con enfermos de Covid. Fue impresionante ver cómo para ellos hasta esta circunstancia de la pandemia ha sido una ocasión para darse cuenta de la gran posibilidad que ofrecía a su vida dentro de la realidad.

También se nos propuso ver la película La vida de los otros para reflexionar sobre cómo un imprevisto que acontece en la realidad puede hacer que volvamos e empezar a vivir poniendo en juego toda nuestra humanidad. Unas chicas prepararon una presentación sobre el Sacro Monte de Varese, uno de los símbolos de nuestra provincia. Fue muy interesante descubrir un lugar que conocemos perfectamente pero que nunca habíamos mirado con tanta atención.

La última noche, el 5 de enero, había setenta personas conectadas. Intentamos profundizar en el lema propuesto por la pregunta inicial, mediante canciones, poesías, cuadros, fragmentos de películas que nos hubieran impactado durante el confinamiento y que nos suscitaran un deseo de mirar con atención la realidad que nos rodea.

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Dos chicas que participaban por primera vez en un gesto de bachilleres dijeron: «Nos hemos dado cuenta de que queremos vivir lo que sucede con una atención distinta, como hemos escuchado estos días». Lo que hemos visto no es solo una manera bonita de pasar las vacaciones, sino un gesto concreto que nos recuerda lo verdaderamente importante: encontrar un sentido a todas las cosas que hacemos, incluso cuando las circunstancias nos aplastan.
Caterina, Varese