Trio en mi bemol Mayor, op. 100 - Sonata para violín y piano n. 2

E. Istomin, I. Stern, L. Rose, D. Barenboim
Franz SchubertSony 2000


Cuando un gran artista encuentra un motivo bello antes o después lo repite, y esa melodía se convierte como en un refrain que, presentándose repetidamente, determina la memoria principal de un cierto pasaje musical.
El Trío op. 100 de Schubert nos propone idealmente el camino de un hombre (casi el recorrido de cada hombre) que aparece sobre la escena del mundo, un joven valiente lleno de ímpetu positivo: desde el inicio la música presenta a este hombre lleno de energía y de deseo de emprender, pero es como si el pasar del tiempo y de las circunstancias comenzara enseguida a hacer emerger problemas, incertidumbres, dolores. (...)
Así, el punto de llegada de esta historia ideal es conmovedor: en el pasaje final, de hecho, es como si el deseo de cumplimiento y la debilidad humana se encontrasen continuamente, hasta el agotamiento de las energías. (...)
Pero en los últimos compases sucede un hecho extraordinario, imprevisible, por el que el tema se transforma y se libera en una respuesta definitivamente positiva: ese hecho misterioso hace eternamente posible el camino humano hacia su cumplimiento.

(Luigi Giussani - texto traducido del fasciculo adjunto al CD)