El perdido hermano pequeño

El Mundo
Lucía Méndez

...Begoña Villacís recibió la llamada y se despidió de su hermano: «Adiós, mi niño». Igual que hemos hecho todas las hermanas mayores unidas por ese vínculo desdichado. Begoña y yo sabemos que, aún viéndolo en el infierno, una hermana mayor soñará siempre con salvar al niño, como el ángel de la guarda de la cabecera de la cama. Y vivirá lamentándose de no haber podido rescatarle de la desgana de vivir...
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