Pasión por lo absoluto

ABC
Pedro G. Cuartango

...Yo mismo estoy enfermo de relatividad y de desencanto. Soy agnóstico, pero cada vez estoy mas tentado a creer que no existe nada después de la muerte. Y desgraciadamente he perdido muchos amigos y familiares en estos dos últimos años. A un paso de la vejez y con mala salud, mi pesimismo es cada vez más exacerbado. La fe de este jesuita que era pecado leer me conmueve. Es una fe que se reafirma en el ostracismo y la persecución intelectual que sufrió. En medio de esas dificultades, escribió que se abandonaba a Cristo con ciega confianza. Y que asumía su silencio como una prueba a la que el Espíritu Santo le sometía. «El universo es arcilla con múltiples posibilidades que Dios modela a su antojo», dijo. En último término, Teilhard realizó la apuesta pascaliana por ese absoluto en el que hay poco que perder y mucho que ganar. Si Dios ha muerto, también nosotros. Si es así, estamos condenados a la nada, a ser un breve instante en el eterno devenir del tiempo. 'Domine, adjuva incredulitatem meam'. Me sumo a la oración.
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