El pastor que conocí
La RazónMi primer contacto con Joseph Ratzinger se dio en las aulas a comienzo de los 80. No fue directamente en una Facultad alemana, claro, sino en el formato «a distancia» disponible entonces: a través de su libro «Introducción al cristianismo». Me ayudó a vertebrar el pensamiento teológico del mejor modo posible, confirmando la fe eclesial que había recibido y con la que debía afrontar muchos desafíos nuevos...
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El pastor que conocí
La RazónMi primer contacto con Joseph Ratzinger se dio en las aulas a comienzo de los 80. No fue directamente en una Facultad alemana, claro, sino en el formato «a distancia» disponible entonces: a través de su libro «Introducción al cristianismo». Me ayudó a vertebrar el pensamiento teológico del mejor modo posible, confirmando la fe eclesial que había recibido y con la que debía afrontar muchos desafíos nuevos...
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