Gracia para la angustia de esta hora

En el Corriere della Sera, el psicoanalista Umberto Galimberti reconoce que la angustia más frecuente es la producida por el nihilismo. Cando empezó a trabajar, en 1979, la mayoría de problemas «tenían un trasfondo emocional, sentimental y sexual, mientras que ahora tienen que ver con el vacío de sentido». Conecto este juicio, cada vez más compartido en amplios sectores del mundo laico, con algunas afirmaciones del secretario de la CEE, Luis Argüello, en un reciente diálogo sobre Ciudadanía y cristianismo en el EncuentroMadrid. Tras reconocer la caída de muchas certezas compartidas y heredadas de la tradición cristiana, afirmó que «la verdad sigue siendo un latido posible del corazón humano», y que escuchar ese latido es una tarea primordial para la Iglesia hoy...
Pincha aquí para seguir leyendo