Don Luigi Giussani

Suiza. La primera conferencia sobre Giussani teólogo

A partir del 11 de diciembre, en la Facultad de Teología fundada por Eugenio Corecco, tres días de estudio sobre la enseñanza del fundador de CL. El director René Roux: «Su teología no es para expertos, su pensamiento ha cambiado la vida a mucha gente»
Luca Fiore

Bajo el título “Luigi Giussani. El recorrido teológico y la apertura ecuménica”, se celebra en Lugano del 11 al 13 de diciembre y es la primera conferencia sobre el fundador de Comunión y Liberación promovida por una Facultad de Teología. La ocasión son los 25 años de la fundación de la facultad de Lugano, querida por monseñor Eugenio Corecco, entonces obispo de la ciudad, que era muy amigo de don Giussani. Tres días de trabajo con dieciséis intervenciones dedicadas a la historia y al pensamiento del sacerdote de Desio que concluirán con una lectio magistralis de don Julián Carrón (aquí el programa completo). «Le confieso que yo también iré a la conferencia con ganas de aprender», dice el profesor René Roux, director de la Facultad suiza. «El pensamiento de Giussani es amplio y profundo y merece la pena profundizar en él».

¿Con qué interés nace esta conferencia?
La razón principal, por lo que me concierne, es la originalidad del pensamiento de Giussani desde un punto de vista teológico. Originalidad entendida como el camino para superar ciertos puntos muertos a los que han llevado algunos teólogos al tomar una postura acrítica frente a perspectivas filosóficas, digamos de carácter kantiano, incapaces de explicar la realidad de lo humano en su totalidad y, aún menos, la fe. La suya es una visión filosófica que permite una renovación también del pensamiento teológico. Tal vez hasta ahora no se ha hecho suficiente hincapié en esta dimensión.

¿Por qué?
Giussani no fue un teólogo para expertos, como diría el papa Francisco, pero su pensamiento ha tenido impacto en muchísima gente. Su manera de hacer teología ha cambiado la vida de muchas personas. Es un aspecto muy significativo: el impacto de su pensamiento. Otro aspecto interesante de la figura de don Giussani es que se trata de un autor de lengua italiana. Las facultades teológicas se centran más a menudo en autores alemanes, franceses o americanos. Sin embargo, su figura es de perfil alto a nivel mundial y su importancia irá creciendo sin duda. Por último, le elegimos a él para esta conferencia porque nos interesaba una figura que tuviese que ver con nuestro territorio, el cantón Ticino. No solo la realidad de CL es importante para nuestra región, sino que el mismo don Giussani tenía muy buena relación con el fundador de nuestra facultad, monseñor Corecco. Todos estos motivos nos convencieron, a pesar de que algunos, durante las reuniones preparatorias, señalaran que se trataba de una «locura»…

¿En qué sentido?
Creo que fue un comentario relacionado con la importancia que, en general, el movimiento de CL tiene sobre todo en Italia. Razones de política y política eclesiástica. Me imagino que alguien temiese que pudiera ser vista como una decisión parcial, que pudiera suscitar reacciones negativas en quien no conozca bien el pensamiento y la enseñanza de don Giussani. Pero aquí estos aspectos no son tan relevantes.

René Roux, director de la Facultad de teología de Lugano

En su opinión, desde un punto de vista teológico, ¿cuál es la peculiaridad de don Giussani?
A esta pregunta podré contestar mejor al término de la conferencia. No es sencillo resumir un pensamiento tan rico y articulado. Sin embargo, en mi opinión, la peculiaridad es haber indicado, en una nueva síntesis, la relación que existe entre experiencia personal y revelación. Según Giussani, se accede a lo verdadero mediante un encuentro: una revelación desde el exterior, un llamamiento que viene de fuera. De este modo, se indica un camino para superar los límites de una concepción de la revelación cristiana demasiado abstracta o no suficientemente ligada a la naturaleza del hombre, a su estructura basada en el diálogo. Donde, sin embargo, este encuentro exterior es un encuentro con la realidad que no ocurre en el mundo de las ideas. Será interesante ver lo que saldrá en la conferencia, sobre todo porque la idea es que los actos se conviertan en punto de referencia para quien quiera profundizar en la riqueza del pensamiento de este autor.

La conferencia valora su apertura ecuménica. ¿Porqué?
Su enseñanza fue acogida incluso fuera de los muros de la Iglesia católica. Es un dato de la realidad. Por esta razón, hemos querido invitar a personalidades que explicaran este fenómeno y que procediesen del mundo ortodoxo, anglicano y árabe.

Usted intervendrá sobre el tema “La hermenéutica de la Escritura en Giussani”. ¿Nos puede anticipar brevemente sobre qué va a hablar?
Me atraía mucho el modo en que Giussani utiliza y explica los pasajes de las Escrituras. Sobre todo cuando, al referirse a los eventos narrados en las Escrituras y a los personajes bíblicos, intenta entender cuál es la experiencia humana que está en la base de lo que leemos. Es una manera interesante no solo de acercarse a las Escrituras, sino también de superar una gran dificultad que, a nivel exegético, emergió en los años 50. Intentaré subrayar los aspectos de este enfoque situándolos desde un punto de vista del contexto histórico.

Hablaba de superar la concepción kantiana. ¿Por qué es importante?
Mi impresión es que la teología cristiana, y en algunos casos la católica, que tratan de conceptos y paradigmas de origen filosófico, han corrido el riesgo de aceptar reducciones de ese tipo. Cuando se abraza una visión filosófica, una perspectiva epistemológica derivada de la Ilustración, del marxismo, o de cualquier otro tipo de filosofía, hay por supuesto elementos útiles, pero hay también elementos que pueden dejar de lado algún factor. Para ciertas formas de divulgación del pensamiento de Immanuel Kant, el hombre solo conoce su propia mente y la realidad exterior es inalcanzable. Por lo tanto, cuestiones como Dios, alma o mundo se convierten en construcciones de la mente humana. Está claro que si se reflexiona desde esta perspectiva, como hizo Kant, la religión queda reducida a un conjunto de enseñanzas morales. Valores tal vez universales, pero que no tienen ninguna relación con la realidad. De esta forma, el cristianismo se reduce a un listado de preceptos. En cambio, Giussani vuelve a poner en el centro la realidad humana original, que es la del encuentro. Cuando yo me encuentro con otra persona no estoy delante de una invención de mi mente. Es una experiencia fundamental que se convierte en una categoría que se aplica a la revelación.