La Fraternidad de San Carlos en audiencia <br>con el Papa.

El Papa, con los sacerdotes de la Fraternidad San Carlos Borromeo

News.Va

“La educación siempre es fundamental para que crezca la verdad”, ha dicho el Papa a los miembros de la Fraternidad sacerdotal de San Carlos Borromeo, durante un encuentro que tuvo lugar ayer en el Vaticano. La Fraternidad es una sociedad de vida apostólica nacida del movimiento Comunión y Liberación fundada, antes de ser sacerdote, por monseñor Massimo Camisasca que hoy es obispo de Reggio Emilia-Guastalla (Italia). Estaban presentes en el encuentro el superior actual rev. Paolo Sottopietra y el presidente de la Fraternidad de Comunión y Liberación, rev. Julián Carrón, junto a 18 sacerdotes procedentes de las misiones en diversos continentes.

“He conocido la fe, la alegría, la fuerza y la riqueza de ideas, la creatividad de la fe del fundador de Comunión y Liberación, don Luigi Giussani -ha dicho el Santo Padre-;así nació entre nosotros una gran amistad y, a través de él, conocí también mejor a su comunidad. Me alegro de que su sucesor esté con nosotros y de que prosiga esta gran obra que inspira a tantas personas, a tantos laicos, hombres y mujeres, y a tantos sacerdotes, para colaborar en la difusión del Evangelio y en el crecimiento del Reino de Dios”.

“También he conocido a Massimo Camisasca; hemos hablado de muchas cosas, he visto su creatividad artística, su capacidad de ver e interpretar los signos de los tiempos y su gran don de educador y sacerdote (...) Es hermoso ver como crece una nueva Fraternidad sacerdotal en el espíritu de San Carlos Borromeo, que es siempre el gran modelo de Pastor que, movido por el amor de Cristo, busca a los más pequeños, los ama y así insufla la fe y hace que crezca la Iglesia”.

“Vuestra Fraternidad es ahora grande, señal de que hay vocaciones -ha concluido-. Pero también es necesaria la apertura de todos para encontrar, acompañar, guiar y ayudar a las vocaciones a madurar. Aprecio, en este sentido, la gran labor de educador de Massimo Camisasca porque hoy la educación es siempre fundamental para que crezca la verdad, para que crezca nuestro ser hijos de Dios y hermanos de Jesucristo”.