Benedicto XVI ha nombrado esta mañana al cardenal Angelo Scola nuevo arzobispo de Milán. Scola, hasta hoy Patriarca de Venecia, ha recibido su nombramiento diciendo que «simplemente acojo con obediencia la decisión del Papa». En un mensaje leído en rueda de prensa y difundido por el periódico italiano Avvenire, Mons. Scola afirma: «Mucho más que argumentos de carácter personal, lo que cuenta es la disposición para acoger el designio de Dios en mi vida. Estoy seguro de que este designio pasa por la acción del Espíritu Santo en la Iglesia, y en ella, de manera especial, por el ministerio del Santo Padre. A pesar de mis límites, gracias a la educación que he recibido desde niño, he aprendido que Dios es siempre más grande y que su designio sobre nosotros, cuando se acoge con ánimo abierto, siempre es el más conveniente, no sólo para la propia persona sino también para todos aquellos que nos han sido confiados. Quiero vivir este nombramiento como un intercambio de amor. Con este espíritu acojo la decisión del Santo Padre y os pido a vosotros que hagáis lo mismo».
La semana pasada, en un artículo profético, José Luis Restán, director editorial de la Cadena COPE, destacaba en un artículo publicado en Páginas Digital la cercanía de Mons. Scola con el Papa Benedicto: «Todos saben de la amistad y confianza del Papa Ratzinger hacia Scola desde muy temprana edad. Saben de su sintonía teológica y de su convergencia sobre temas absolutamente calientes como la laicidad positiva, el diálogo con los no creyentes o la forma del testimonio cristiano en la ciudad secularizada».