Competencias y trabajo: desafíos para la escuela de hoy

Ignacio de los Reyes

Es necesario una gran creatividad e inteligencia para afrontar el momento que vivimos, que por muchas razones puede considerarse, como ha recordado el Papa Francisco, «un cambio de época». Los dos días del Congreso fueron una preciosa oportunidad para que más de cien profesores y profesionales de la educación afrontáramos juntos algunos de los desafíos que tocan el corazón de la educación: ¿Cómo puede ayudar la escuela a que la persona crezca? ¿Qué competencias debemos impulsar y desarrollar? ¿De qué manera debemos acompañar a nuestros estudiantes en su paso al mundo del trabajo?

«La persona tiene que ser el centro de nuestras escuelas», señalaba Antonio Blanco, director de la Asociación Salesiana de Tecnología e Innovación. En este sentido, Giorgio Vittadini, presidente de la Fondazione per la Sussidiarietà, expuso de qué manera la escuela debe favorecer el crecimiento de la persona: «Las competencias transversales o habilidades no cognitivas tienen un gran valor en la educación de hoy, ya que favorecen un método que permite a nuestros alumnos afrontar mejor la realidad que los rodea y su propia vida. Pero estas competencias no pueden transmitirse mecánicamente. Por ello, deben integrarse en un marco educativo más amplio, definido por la autonomía de los centros, la libertad de educación y la personalización en el aprendizaje».

Ignacio Bosque, académico de la RAE, señaló la importancia de los profesores y del papel que desempeñan: «no podemos dar recetas a nuestros alumnos. Tenemos la difícil tarea de hacer que algo se mueva dentro de sus cabezas». Para ello, es imprescindible que los profesores conozcamos y amemos nuestras asignaturas. Como indicó José Manuel Almuzara, arquitecto, «del amor por las cosas nace una gran creatividad, como podemos ver en la obra de Gaudí».

Como recordó el profesor Vittadini, «educa una comunidad que propone un horizonte ideal, que desafía la razón y libertad de sus alumnos». En el Congreso que Be Education ha realizado por primera vez hemos podido constatar de nuevo que la tarea educativa es eminentemente comunitaria. Es posible realizarla si los profesores nos ayudamos a mirar aquellas experiencias y personas que pueden renovar y sostener nuestra pasión por educar.

Puedes ver las conferencias principales del congreso en www.cbe16.es