1. Los próximos pasos y sus razones
Buenas noches a todos. Qué bello volver a verse, aunque el Covid nos obligue aún a mantener una pantalla entre nosotros durante un tiempo, esperemos que poco.
Os agradezco que hayáis podido sacar tiempo para participar en este momento en el que quiero compartir las razones de los pasos que deberemos afrontar en las próximas semanas. Creo que en este momento tenemos la oportunidad de preguntarnos seriamente si queremos aprender algo, es decir, si queremos jugar esta partida intentando demostrar algo o aprender algo que tal vez aún debamos entender o profundizar en el carisma que hemos recibido.
Se ha dicho que estamos en un tiempo de interim. ¿Pero qué significa realmente esta palabra –interim– para nosotros? Es una hoja de doble filo porque interim puede ser la percepción de la densidad del instante, o bien una excusa para una falta de disponibilidad. Falta de disponibilidad no tanto para seguir al líder de turno, a la espera de que cambie la tendencia, sino una falta de disponibilidad ante Dios. El hecho de que uno afronte este tiempo así ya quiere decir que pone límites a la acción de Dios en su vida y en la historia. ¡Porque en un instante Dios puede cambiar la historia! Ese instante también podría ser este. ¿Y yo dónde estoy? ¡El problema entonces es estar! Nuestro problema hoy es estar, estar presentes ante las cosas presentes, como decía don Giussani, «mirar como presencia las cosas presentes»…
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