La peregrinación al alba (Foto: Leonora Giovanazzi)

Macerata-Loreto. La llamada del papa Francisco

Por sexto año consecutivo el Santo Padre ha querido saludar a los fieles al inicio de la peregrinación a pie. El texto y el vídeo de la llamada a monseñor Giancarlo Vecerrica

Mons. Vecerrica: Santo Padre, ¿oye el aplauso? ¡Son miles de jóvenes venidos de todo el mundo!

Papa Francisco: ¡Qué bonito! Los saludo a todos. Un abrazo a todos. A cada uno y a todos.

Mons. Vecerrica: Esperamos sus palabras, agradecidos porque es la sexta llamada telefónica que usted nos hace. ¡El sexto año! Pero, ¡qué fiel nos es! ¡Cuánto nos quiere!

Papa Francisco: Me gusta cuando veo a jóvenes valientes que se ponen en camino durante una noche entera. Es hermoso. Es una buena señal. Es una buena señal de coraje, y eso me gusta.

Mons. Vecerrica: Este es el aplauso. Están aquí el cardenal Ouellet, el cardenal Menichelli, los obispos de Las Marcas, y muchos, muchos jóvenes. Dentro de poco será la santa misa y después caminaremos durante toda la noche, y mañana por la mañana la consagración a la Virgen de Loreto.

Papa Francisco: Qué hermoso. Saludo al cardenal Ouellet, al cardenal Menichelli. Muchos saludos a todos los obispos que están allí. Y saludo a todos los jóvenes. ¡Un gran saludo a todos!

Ahora empezáis a caminar, después de la santa misa. Es una buena señal, porque la vida es un camino. En la vida no se puede quedar uno quieto, porque si un joven está quieto, se jubila a los 20 años. Y eso es algo feo. La juventud es para jugarla. Para apostar, para seguir adelante y dar frutos.

Muchos saludos a vosotros, queridos jóvenes, que empezáis a caminar esta noche. ¡Os mando un gran saludo! Pensad que la vida es un camino. Siempre adelante, buscando la felicidad para nosotros y para los demás. Pero daos cuenta de que la felicidad no es una cosa que se compra en el supermercado. La felicidad está solo en amar y en dejarse amar. Amar a los demás.

Las guerras no te dan felicidad. Las enemistades no te dan felicidad. El chismorreo no te da felicidad. El amor, el servicio de uno por los demás: este es el camino, la vía de la felicidad.

Id adelante, siempre mirando al horizonte. ¡Siempre! Allí veréis que es importante caminar, que es importante ir mirando al horizonte. Cada día un paso adelante. Esto es vida, esta es la fecundidad de la vida.

Queridos jóvenes, vosotros que os ponéis en camino esta noche… Este camino es una señal, es una señal de la vida. La vida es un camino. Id cada día adelante, cada día hacia el horizonte, cada día hacia la felicidad que consiste en amar a Dios y amar a los demás. Os deseo un buen camino, os deseo una santa noche y mañana un encuentro con el Señor y con la Virgen.

Y, por favor, os pido que recéis por mí. ¡Muchas gracias!



Mons. Vecerrica: ¡Este es el aplauso para decir “sí”, que rezaremos mucho por el Papa!

Papa Francisco: Gracias. Muchas gracias. ¡Un abrazo a todos!