Lugo

Lugo. Una historia que no se ha parado

La biografía de Luigi Giussani se ha presentado este fin de semana en esta ciudad gallega, en un encuentro entre su obispo, monseñor Alfonso Carrasco, y el italiano Claudio Bottini
Alfonso Calavia

«El corazón de nuestra propuesta es el anuncio de un Acontecimiento que sorprende hoy a los hombres como hace dos mil años». Esta frase de Giussani sigue impresa en la mente y el corazón de Claudio Bottini, un italiano que este fin de semana ha pasado unos días en Galicia acompañado de varios amigos y ha participado en la presentación de la biografía del fundador de Comunión y Liberación, Luigi Giussani. Su vida junto al obispo de Lugo, monseñor Alfonso Carrasco.

La prueba de esa sorpresa que permanece es que «la historia de don Giussani no se ha parado y esta noche es un ejemplo de esto», añadió Bottini. «El cristianismo se comunica de persona a persona, de alegría en alegría, de caridad en caridad». Recordando la vida que compartió con don Giussani, destacó que «lo más determinante para mí fue ver en él que la fe tenía que ver con todo». Desde su modo de leer a Leopardi, que se convirtió en un auténtico compañero de camino, o su manera de estar presente en clase. «Cuando escuchó a Gaetano Corti decir que el Verbo se hizo carne entendió que ningún instante era banal. Esto me sigue conmoviendo después de cuarenta años de experiencia dentro del movimiento y ha marcado mi propia humanidad».

«¿Por qué existen los movimientos?», empezó diciendo monseñor Carrasco. «Dios envía personas con una gracia particular para enriquecer la vida de la Iglesia». El obispo de Lugo abordó la situación de crisis actual, de un mundo en rápida transformación, y afirmó que «los hombres son cada vez menos proclives a cosas nuevas. Hay desafíos presentes que necesitan nuevas respuestas. (…) ¿Qué piensa hoy un chaval de parroquia sobre el cristianismo? Pensará que es una cosa buena pero para sus abuelos. A él no le dice nada. Y eso pueden pensar aquí en nuestras parroquias».

La presentación de la biografía de Giussani en Lugo

Alfonso Carrasco insistió en que «la fe es posible por una Presencia viva que te interpela. Esto necesitamos volver a aprenderlo». Pero para volver a aprender algo que uno puede dar por descontado, es necesario hacer un trabajo de comparación con la propia experiencia. «¿A mí me cambia mi fe? Si no me cambia a mí, ¿por qué va a interesarle a otro? Es una amistad. Una compañía. Sin esto la fe se vuelve profundamente irreal».

Respecto al carisma y la historia de don Giussani, el obispo de Lugo afirmó que «CL hacía mucha falta. Hacía falta poder ver con los ojos que la fe no es una doctrina sino lo que hace al hombre vivir». En la persona del fundador de Comunión y Liberación, monseñor Carrasco identifica la urgencia de «volver a vivir como cristianos, volver a comprender qué grande es la fe, qué decisiva es para la vida cuando todo en este mundo nos dice lo contrario. Para Giussani no había otra cosa que tú cuando hablabas con él. La persona era lo importante. Como para Jesús. Esto hay que vivirlo de nuevo y solo se da cuando sucede en alguien en el presente».

Para el obispo, este libro, esta vida, supone una gran novedad para todo programa pastoral. «Si falta mi persona acabamos dando lecciones. En la vida pastoral, en muchas ocasiones, ponemos la esperanza en los instrumentos y en los análisis, y es correcto que lo hagamos, pero estos no pueden sustituir a las personas. Los análisis no producen humanidad. Sin nosotros, los instrumentos no sirven, se quedan en nada». Resumiendo, en palabras de monseñor, el programa del cristiano podría ser «sigamos aquello que construye nuestra persona».