De acuerdo, falta un mes para las elecciones y David Cameron tiene motivos para pedir perdón a los electores cristianos (por ejemplo, la aprobación del matrimonio homosexual). Además, ya hizo su felicitación pascual el año pasado, con un discurso similar. También hay que decir que al primer ministro saliente le gusta mucho hacerse ver en los momentos importantes para las comunidades religiosas, pues también intervino con motivo del Ramadán y de la principal fiesta de los sij. Además, el resto de líderes políticos, uno declaradamente ateo, otro de origen hebreo, otro anglicano no practicante, han hecho públicamente, cada uno a su manera, una felicitación pascual.

Pero con todo esto, merece igualmente la pena releer las palabras pronunciadas por Cameron en este video-saludo: «La Pascua es el tiempo en que los cristianos celebran la victoria de la vida sobre la muerte en la resurrección de Jesús. Es tiempo para reflexionar sobre el papel de los cristianos en la vida de nuestra nación». La Iglesia no solo es una serie de edificios, ha dicho el inquilino de Downing Street: «Sino una fuerza viva de acción. Cuando la gente está sin techo, la Iglesia está ahí, con un plato caliente y un refugio. Cuando la gente sufre o padece una drogodependencia, la Iglesia está ahí. Sé por experiencia, en los momentos más duros de mi vida, que la Iglesia puede ser de gran ayuda. En nuestro país los cristianos no se limitan a hablar del amor al prójimo, sino que lo viven: en las escuelas, en las prisiones, en diversas comunidades».

Es por ello, añadió, que el Reino Unido, que acoge a todas las religiones, sigue siendo un país cristiano. Y aquí viene la parte más sorprendente del discurso: como país cristiano, Gran Bretaña debe condenar las persecuciones de los cristianos que se están produciendo en todo el mundo. «Es realmente sobrecogedor que en 2015 haya cristianos amenazados, torturados y asesinados por motivo de su fe. De Egipto a Nigeria, de Libia a Corea del Norte. En Oriente Medio los cristianos están obligados a huir de sus casas. A todos esos cristianos que en Iraq y Siria tienen que elegir entre la muerte y abandonar su fe les decimos: estamos con vosotros». El premier saliente ha destacado la ayuda humanitaria que en este sentido ya se ha dado, y se ha comprometido en los próximos meses a luchar para garantizar la libertad religiosa en dichas regiones.

Muchos electores ingleses, no solo los cristianos, tendrán curiosidad por descubrir si se trata solo de promesas electorales que se lleva el viento, y si Cameron, el año que viene volverá a enviar su felicitación pascual desde Downing Street.

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