El Día Nacional de la Colecta de Alimentos se celebra en Brasil desde el año 2006. Comenzó en la ciudad de Sao Paulo por iniciativa de algunos que conocieron esta experiencia en Italia. Una experiencia que les contagió y en este quinto año de Colecta han participado hasta 37 ciudades brasileñas de forma simultánea.
Se han recogido 113,5 toneladas de alimentos, un 14% más que el año anterior, cuando se llegó a 99 toneladas. Estos números tan positivos son el resultado del trabajo constante por parte de los voluntarios, que se repartieron entre más de 200 supermercados del país durante una jornada que duró 11 horas.
La jornada estuvo marcada por la alegría de los voluntarios, que contagiaban a las personas que donaban alimentos y a los trabajadores de las tiendas que se adhirieron a la campaña. Uniformados con su chaleco amarillo y los panfletos en la mano, cada uno entregó su tiempo gratuitamente; al final todos estaban cansados, pero más contentos.
Participó gente de todas las edades y muchas familias llevaron a sus hijos, como una ocasión educativa para ellos. Es el caso de Laura Cristina, de 9 años, que acompañó a su padre en un supermercado de Brasilia, y que decía: “Estoy muy contenta. Para mí, la Colecta es un acto de amor a las personas necesitadas. Estoy muy feliz por todas las personas que han ayudado. El año que viene también se podría hacer un Día Nacional de Colecta de Juguetes”.
João Marcos, de Sao Bernardo do Campo, pasó el día lejos de los supermercados. Se encargaba de recibir las cajas de alimentos que iban llegando al almacén desde las tiendas de Sao Paulo. “Ha sido un trabajo muy duro. De madrugada, ya estábamos descargando los camiones y organizando las cajas en los palés. Invité a varios amigos y lo que más me impresionó fue ver cómo estábamos trabajando, contentos. Mucho más que hacer un gesto de caridad, hemos profundizado en el significado de nuestra amistad de una forma totalmente nueva para nosotros”.