Un grupo de amigos nos sentimos muy provocados por lo que nos pidió el Papa en la audiencia del 15 de octubre en Roma: participar con él en la profecía por la paz. Lo comentamos juntos y nos preguntamos qué nos decía esa propuesta.
Tuvimos que preguntarnos por el significado de la palabra paz, aparentemente muy sencillo, pero casi imposible en el contexto actual, y nos pareció que el Papa estaba hablando de otra cosa, de un concepto de paz distinto del nuestro: una paz sin condiciones y no “política”.
Así que decidimos organizar un acto público, pensando que no podía haber mejor momento que el Adviento para anunciar esta profecía por la paz, ni un lugar mejor que Times Square para anunciarlo.
Con casi 70 amigos de la comunidad, nos reunimos el sábado 17 de diciembre en Times Square por la tarde para cantar juntos villancicos y leer algunas reflexiones sobre la paz del papa Francisco y don Giussani. Imprimimos un cuaderno para repartir entre la gente que pasaba por allí para que pudieran acompañarnos o llevárselo a casa.
Los que se pararan acababan contagiados por nuestra alegría y nos preguntaba quiénes éramos. La respuesta no cabía en una frase pero se reflejaba en la luminosidad de nuestros rostros, eso era lo que llamaba la atención. En un momento en el que todo el mundo se manifiesta en contra de algo, un grupo de personas alegres cantando por la paz, sin condiciones, atrae y corresponde. A pesar de que mandamos el comunicado en el último momento, también apareció la prensa, signo de la novedad que suponen hoy la alegría y la oración por la paz.
Alessandro, Nueva York