Andrea Monda con el papa Francisco

«La alegría permite afrontarlo todo»

Un grupo de bachilleres italianos se encuentra en Roma con Andrea Monda, director del Osservatore Romano, que respondió a sus preguntas

Lunes 30 de diciembre, vacaciones invernales en Roma con los bachilleres italianos. Encuentro con Andrea Monda, director del Osservatore Romano.

Monda respondió a las preguntas de los jóvenes hablando de sí mismo, de la experiencia que le llevó a dirigir el diario del Papa. Lo hizo con episodios de su vida, consciente de que se responde mejor cuando se testimonia lo que uno vive, y no ofreciendo frases preparadas.
De su nueva aventura como director, Monda dice que todavía está intentando comprender por qué, hace un año, aceptó la propuesta, dejando su puesto como profesor de Religión que tanto le apasionaba.

Luego habló de la visita del Papa a la escuela donde daba clase antes de ser director. Fue, dijo, una grandísima emoción porque le enseñó que en cualquier contexto en que uno viva, el método es siempre el diálogo.
Monda continuó diciendo que él quiere incluir en el Osservatore Romano la mirada de los jóvenes. Y que eso se lo enseñó el papa Francisco cuando, de visita en la escuela de Roma, quiso escuchar especialmente a los chavales. Por ello, añadió el director, quiere inventarse algo para las páginas de su periódico donde se dé voz a los jóvenes para colmar la brecha entre generaciones.



A un chico que le preguntó qué podría hacer por el periódico del Papa, Monda le respondió que esa inquietud suya ya era algo muy positivo porque le indica por dónde buscar la respuesta. Como ejemplo, citó la película del Día de la marmota, que muestra la belleza de la vida en la que cada día todo vuelve a empezar para nosotros. «Nuestra vida es una respuesta, somos llamados y debemos responder. A mí me llamó el Papa y debía responderle, llevando a las páginas de su diario lo que más le preocupa. Es una tarea de una responsabilidad vertiginosa».

Luego añadió que el hombre a menudo se enfrenta a sensaciones confusas, pero antes de la confusión y el miedo está la alegría. «Debemos recordar que la alegría permite afrontarlo todo». El dato fundamental de la vida, para Monda, es que todo se puede vivir en relación con alguien porque las relaciones son lo que nos permite afrontar la confusión.
Monda terminó el encuentro diciendo qué es lo que le mueve y lo que, en el fondo, mueve a todos: la curiosidad por descubrir siempre algo nuevo, algo más del otro. Solo se puede conocer mejor el mundo a partir de un interés por el otro, el deseo de entender quién es el otro.
Gianni, Abbiategrasso