Lamezia. «La belleza sucede sin pedirnos permiso»

El mismo "respiro" treinta años después. Gracias a un simple "sí" a la propuesta de un amigo, una velada con jóvenes de Acción Católica. «Cristo ha vuelto a salirme al encuentro»

Es cierto que «la belleza viene, sucede sin pedirnos permiso». Y que «la preferencia es el método de todo despertar». Como un imprevisto, «algo que no podía existir porque nunca habíamos pensado en ello, y que está aquí». Es «algo de lo que tenemos nostalgia».

Hace unos días, de vuelta del trabajo llamé a Tonino, un amigo de la Fraternidad. Antes de colgar, me dice que iba a quedar con unos amigos de Acción Católica y decidí ir con él, sin ninguna expectativa en concreto.

Tonino estaba sentado entre unos veinte chavales universitarios y su responsable, Luca, joven abogado, dirigente nacional de la asociación.

En los meses pasados, había visto a Luca y a algunos de estos jóvenes participar con entusiasmo en la "Escuela de Política", organizada por Tonino con unos amigos, adhiriéndose a la propuesta de Giorgio Vittadini, presidente de la Fundación para la Subsidiariedad. Tuve la intuición de que ese momento era el resultado de una estima que había llevado a Luca a presentar a Tonino a todas las personas a las que acompaña como educador.

Durante esa velada, Tonino habló de sí mismo , de su trabajo, de unas obras que había llevado a cabo en los años pasados, de la realidad complicada que vivían allí, en Lamezia Terme. Y también de la situación política en Calabria y en Italia. Luca y sus chavales le bombardearon con muchas preguntas, y una, en concreto, del propio Luca, salió varias veces: «En todo esto, ¿dónde está Cristo? ¿Qué tiene que ver con la fe?». Tonino contestó que, sin fe, determinados episodios de su historia le habrían aplastado y, para mí, solo el hecho de verle allí con esos jóvenes era una hermosa confirmación.

También fue muy bonito ver a los dos educadores, Luca y Tonino, en acción: superando cada obstáculo, solo con el deseo de introducir a esos jóvenes en la realidad, partiendo de una identidad común, es decir, la de hombres "movidos" por el encuentro con Cristo. Sentados a la mesa, Luca me reveló que para él es muy importante la fidelidad a este lugar, a estos chavales, antes que cualquier compromiso institucional.

Volviendo a casa, pensba que llevaba treinta años sin respirar ese ambiente, entre jóvenes tan despiertos y atentos, desde que estaba en el CLU, los universitarios de CL. En un momento de la vida que refleja a la perfección lo que describe la introducción del viernes por la noche de los Ejercicios de la Fraternidad, Cristo volvía a salirme al encuentro en una compañía humana tan bonita como la de Tonino, Luca y sus chavales.

He vuelto a partir de ahí, empezando a mirar con más atención esa "Escuela de Política" donde ha nacido todo lo que visto. Hasta el punto de que, al día siguiente, invité a un universitario, un vecino, a participar en esta escuela y le presenté a uno de los jóvenes ya implicados. Y ellos han decidido ponerse a trabajar juntos.

No puedo hacer otra cosa que seguir mirando lo que me sucede y dejarme "mover" por esa Presencia que he vuelto a descubrir. Una Presencia a la que, para hacerme compañía, no le importan ni los esquemas ni las condiciones.
Antonio, Lamezia Terme (Catanzaro)