Don Emil con algunos amigos de la comunidad de CL en Camerún

Camerún. «El nuevo inicio es hoy»

Una situación económica complicada, con la sombra de una guerra civil y la amenaza de Boko Haram. Y las jornadas de apertura de curso en Yaoundé, Douala, Sop. La carta del padre Emil, sacerdote camerunés que conoció el movimiento hace poco

Al comienzo no fue así. ¿Por qué hay un comienzo? ¿Qué tiene que pasar para que haya un comienzo? Cuando tratamos de volver a un comienzo ya está empezando algo.

Las jornadas de apertura de curso de Yaoundé y Sop en Camerún dejaron huella en la experiencia de cada uno de nosotros, sobre todo en la mía. La necesidad de recuperar este inicio para que la experiencia de hoy sea siempre como “el fuego del principio”.

De las tres comunidades de nuestra Fraternidad en Camerún –Douala, Yaoundé y Sop/Kumbo– tuve la alegría de participar en dos jornadas de apertura de curso: Yaoundé, la capital, y Sop/Kumbo, en la parte anglófona.

El encuentro de Yaoundé fue un desafío para mí, para entender por qué «hoy y el comienzo no son lo mismo, y cómo hacer para que el inicio y hoy coincidan siempre». Me doy cuenta de que hay una distancia real entre el inicio y hoy porque, como dice Julián Carrón, descubro un formalismo y una rutina aun haciendo las cosas por Él, porque en último término estoy separado de Aquel que hace que todo se sostenga, como recordaba Mireille en su testimonio.

Refugiados que llegan a Camerún desde Nigeria y República Centroafricana, huyendo de Boko Haram

He comprendido que yo también corro ese riesgo como sacerdote, que es necesario volver a poner a Cristo siempre en el centro, en el corazón de mi vida. Mantener la llama siempre ardiendo. Cuando el hoy no coincide con el inicio, vivo en el lamento, en la pretensión o en la depresión, y mi vida no tiene gusto alguno, pierdo la alegría. Qué gracia he recibido al conocer a estos amigos que me remiten siempre al inicio.

El encuentro en Sop/Kumbo fue muy emocionante. Me recibieron con gran alegría por la agitada situación sociopolítica que están viviendo allí. La gente vive con miedo. Solo la fe da la fuerza necesaria para seguir adelante. Recuperar el inicio era el punto desde el que afrontar esta difícil situación. Vivir el entusiasmo del principio anima y reaviva el corazón, y ayuda a afrontar una situación social muy complicada. Nuestros amigos viven con miedo a una guerra civil y bajo la amenaza de Boko Haram. La belleza del encuentro juzga como una gracia el tiempo que vivismo. Me vuelven a la mente las palabras de Peter, y también las de Richard, un amigo nuestro de la Fraternidad de San José. En esta situación tan difícil, ambos percibían que la única salvación en medio de esta realidad social de persecución es vivir tendiendo constantemente al inicio. La compañía ayuda a vivir el acontecimiento del inicio hoy. Dicho por gente que para hacer la Escuela de comunidad emplea una jornada de camino, recorriendo una media de doscientos kilómetros.

Esta jornada de apertura de curso no solo m e ayuda a recuperar el acontecimiento del inicio, del origen, sino sobre todo a vivir el carisma del movimiento en la vida cotidiana, volver a buscar el acontecimiento del origen, el nexo entre el inicio y hoy. He descubierto algo estupendo: que hoy sucede un acontecimiento nuevo y que el hoy, la vida diaria, es siempre un nuevo inicio.

Esta conciencia nació a raíz de una pregunta de Raphaëlle, una chica de Eseka que vino a Sop y me preguntó: «Quien no tiene un inicio, ¿qué hace?». Le dije: «Uno siempre tiene un inicio. Busca el tuyo, lo encontrarás». Pero pensándolo mejor, ese día también era un inicio para ella, y no solo para ella, también para mí. El inicio de una conciencia nueva de que el acontecimiento de Cristo es siempre nuevo y lleva siempre a un nuevo inicio.

Don Emil, Camerún