San Pedro y San Juan en el sepulcro de Cristo, de Giovanni Francesco Romanelli, 1640. © Los Angeles County Museum of Art.

El video del Cartel de Pascua

Los apóstoles Juan y Pedro en el sepulcro vacío, en una obra del siglo XVI de Giovanni Francesco Romanelli, acompañan este año las palabras de don Giussani

Los hombres, jóvenes y no tan jóvenes, necesitan una cosa en última instancia: la certeza de la positividad de su tiempo,
de su vida, la certeza de su destino.

«Cristo ha resucitado» es la afirmación de que la realidad es positiva; se trata de una afirmación amorosa de la realidad.
Sin la resurrección de Cristo nos queda solo una alternativa: la nada.

Cristo se hace presente, puesto que ha resucitado, en todos los tiempos, a través de toda la historia. El Espíritu de Jesús
–es decir, del Verbo hecho carne– se torna experimentable, para el hombre de todos los tiempos, en Su fuerza redentora
de la existencia entera de cada individuo y de toda la historia humana, en el cambio radical que produce en quienes se encuentran con Él y, como Juan y Andrés, le siguen.

Luigi Giussani