Wael Farouq: "Los atentados de París atacan lo que une a musulmanes y cristianos"

Pietro Vernizzi

“No es casual que los atentados de París hayan sido contra un teatro y un estadio, es decir, lugares donde la gente se reúne. El verdadero enemigo del Isis es de hecho esta ‘zona gris’ de la sociedad donde no existen categorías netas sino solo personas con su deseo de belleza y felicidad”. Son palabras de Wael Farouq, profesor egipcio en la Universidad Católica de Milán y en la Universidad Americana de El Cairo.

En el Angelus del domingo, el Papa Francisco ha dicho que “utilizar el nombre de Dios para justificar el camino de la violencia y el odio es una blasfemia”.
Comparto totalmente las palabras del Papa, nadie puede ofrecer justificación alguna para lo que ha sucedido en París.

Muchos se preguntan si el Isis representa el verdadero islam.
La cuestión es que no existe ni un verdadero islam ni un falso islam. Solo existen musulmanes, que deben ser juzgados en función de sus acciones y no de su religión. Si juzgamos una religión en función de las acciones de algunos musulmanes, hacemos exactamente lo mismo que está haciendo el Isis: tratar de dividir el mundo en dos cambios, a un lado los buenos y al otro los malos. Buscar la fuente de este mal y de esta violencia en la religión de una cuarta parte de la población mundial, poniendo en el punto de mira a todos los musulmanes, sosteniendo al mismo tiempo que los Hermanos Musulmanes son demócratas, que Jabhat al-Nusra en Siria es moderado y eligiendo a Arabia Saudí para formar parte del Consejo de los Derechos Humanos, produce el resultado de perseguir al islam y dar el beneplácito a los islamistas. Pero el problema son precisamente los islamistas y el islam político.

¿Cómo valora la reacción de Francia?
Hemos asistido a dos reacciones opuestas. El presidente Hollande ha cerrado las fronteras, mientras la gente de París ha abierto las puertas de su casa. La respuesta adecuada al terror es la acogida de los franceses que han decidido rechazar el miedo y abrir sus puertas a los extranjeros. Esto es lo que hay que hacer, y no responder al mal con mal, tratar de justificarlo o ponerlo en relación con determinadas regiones o grupos sociales.

¿El Isis tiene un proyecto o solo quiere matar al mayor número de personas posible?
La tragedia de París documenta que el Isis quiere destruir los espacios de convivencia. Recuerdo que el primer acto del Isis fue enviar a todos los musulmanes de Oriente Medio a vivir en sus territorios. El objetivo es eliminar esos ámbitos donde musulmanes y cristianos, ateos y hebreos, en resumen todas las personas del mundo puedan vivir juntas en armonía. Lo documenta el simple hecho de que los terroristas destruyan museos y monumentos, porque la belleza es lo que une todos los corazones humanos. Su enemigo es la belleza en cuanto tal.

¿Qué debe hacer Occidente para luchar contra el Isis?
Las políticas europeas hoy son incapaces de hacer frente al Isis, pero la gente que vive en Europa sí es capaz de hacerlo. El instrumento es precisamente la acogida de la que hablaba antes. En cambio, quien demoniza las diferencias entre religiones y culturas colabora de hecho con los esfuerzos del Isis por dividir el mundo. El Isis quiere destruir la llamada “zona gris”, es decir, esos ámbitos donde no se puede saber quién es musulmán y quién no.

¿En qué sentido habla de “zona gris”?
La “zona gris” es esa en que yo, como musulmán, comparto con los cristianos europeos los valores, la alegría y la felicidad. No es casual que los kamikaze hayan elegido un teatro y un estadio, dos lugares donde no es posible distinguir quién es musulmán o no. Nuestra tarea es ser esa “zona gris” que ellos quieren destruir.

¿Por qué el yihadismo parece proceder siempre del islam suní y nunca del chií?
En este momento no deberíamos mirar las diferencias entre chiítas y sunitas, cristianos y musulmanes, sino lo que tienen en común. Me refiero a la persona humana y su deseo de belleza y felicidad, a los elementos que son comunes a todas las religiones. Muchos de los musulmanes que viven en Europa, tanto sunitas como chiítas, viven en armonía con las personas de otras religiones, mientras que los terroristas representan una minoría. Debemos mirar esta realidad, y no ir en busca de una teoría.

En su opinión, ¿quiénes son los musulmanes moderados?
Le respondo con una paradoja. Hace pocos años Al Qaeda era considerada extremista, mientras que hoy se considera que en Siria representa una facción moderada. En resumen, los llamados “islámicos moderados” son un concepto muy relativo y que cambia con el tiempo. El dato de hecho es otro.

¿Cuál?
Existen millones de musulmanes que tienen una interpretación del Corán completamente distinta de la del Isis, y que tienen estilos de vida que no están en conflicto con los valores europeos.

El Isis ha justificado los atentados afirmando ser víctima del imperialismo occidental, ¿es realmente así?
No, el Isis no es una víctima. Las potencias europeas han contribuido de un modo u otro a fortalecer al Isis; por lo demás el Estado Islámico y el islam radical han sido armados sobre todo por Estados Unidos. Aunque en la sociedad y en la historia islámica esta tendencia siempre ha estado presente. Pero el dato de hecho al que me refiero es que los atentados del Isis no van a atacar a Occidente en cuanto tal sino a la “zona gris” de la que hablaba antes.